Lo más satisfactorio de la industria cafetera en Antioquia es la existencia de un gran número de pequeñas plantaciones pertenecientes a labradores y jornaleros, porque en ellas el cultivo se hace con más esmero, aprovechando cuanto abono resulta en la casa o en la granja, y ocupando los ratos libres de todos los integrantes de la familia cafetera.
Antioquia nunca fue de grandes haciendas, a diferencia de otras provincias en Colombia, lo cual condujo a una agricultura de parcelas de tipo familiar, circunstancia que tiempo después provocaría la colonización antioqueña.
La identidad de los paisas se destaca por su laboriosidad, espíritu emprendedor, deseo de aventura y por haber llevado al desarrollo de la región, donde el cultivo del café fue uno de los principales motores de desarrollo en Antioquia.