La llegada de los españoles a América generó un mestizaje culinario donde el maíz empezó a ser identificado por los colonos como un alimento de gran importancia y simbolismo en estas nuevas tierras.
En Latinoamérica se acostumbra a comer granos de mazorca de maíz cocidos en agua. Esta sería la forma más sencilla de consumo. Sin embargo, a lo largo de la historia gastronómica del maíz se han creado exquisitos platillos, como es el caso de la mazamorra.
Es habitual que en horas de la mañana circulen las motos y carritos de madera con una gran olla encima y un altavoz voceando " Mazamorra, con leche ", lo que motiva a la gente a salir a comprar por cucharones la mazamorra.
Finalmente, la mazamorra generalmente se sirve acompañada de panela, bocadillo de guayaba o miguelucho, que es un dulce con leche cortada.